Marisol San Román, 25 años, científica social, maestrando en Madrid. Esa era mi biografía de instagram @merysunsr, y como me conocía la mayoría de las personas hasta hace un mes. Pero todo cambió un 19 de marzo, cuando un video mío en el Hospital Agote se viralizó y pase a ser conocida por todos como ¨La paciente 130¨.
Hoy en día muchos me llaman ¨leona¨, así fue como me apodo Cachito Vigil (ex entrenador del equipo nacional de hockey argentino), y otros solo como ¨130¨. La realidad es que mi vida cambió por completo desde el día en que me diagnosticaron COVID 19 positivo, y salí a dar la cara, a romper el estigma sobre la enfermedad y a liderar una batalla en contra de la discriminación y el acoso tanto a pacientes, sospechoso como a el personal de salud.
Mi país me puso en el rol de concientizadora social, y me abrieron las puertas en muchos medios de comunicación; el más importante sin duda mi instagram, donde todos los días hablo de forma directa con mis amigos virtuales que me llenan de luz y esperanza.
La guerra que el enemigo invisible desató dentro mio, ni las tres internaciones, o el oxígeno, se comparan al alcance del mensaje de concientización y unidad que pudimos dar todos juntos en este tiempo.
Por Marisol San Román / 8 de abril de 2020
Marisol San Román se infectó con Covid-19 en Madrid. Al llegar a Buenos Aires tuvo síntomas y supo que había contraido la enfermedad. Hoy no terminó el tratamiento porque en los análisis aún le detectan carga viral. Creó una lista (aquí lista para imprimir o guardar) con las cosas que los pacientes se deben controlar. Y escribió un texto desgarrador y grabó un video donde advierte las consecuencias del coronavirus y el tratamiento que lleva adelante.
Este sitio está protegido por reCAPTCHA y la política de privacidad y términos de servicio de Google aplican.
Diseño por The Leiter Agency